Cada 16 de octubre celebramos el Día Mundial de la Alimentación. Este año se celebra bajo el eslogan “No dejar a nadie atrás”, el lema principal de la Agenda 2030. El origen de esta celebración lo encontramos en el año 1979, cuando es decretado por la Organización de las Naciones Unidas para la agricultura y la alimentación (FAO). Esta conmemoración tiene como fin visibilizar el problema alimentario mundial, así como reunir esfuerzos en la lucha contra el hambre, la desnutrición y la pobreza.
La alimentación constituye un elemento esencial para la supervivencia humana, a través de esta acción el cuerpo genera la energía necesaria para conservar el organismo y desarrollar sus funciones. Para lograr un estado de bienestar es necesario llevar una nutrición equilibrada, en lo cual influyen la cantidad de comida que se ingiere, los hábitos alimentarios creados y la calidad de los alimentos que adquirimos.
El Día Mundial de la Alimentación es una fecha clave para reflexionar sobre un tema crucial para la humanidad: el acceso a alimentos saludables y suficientes para todos. Esta jornada, celebrada cada 16 de octubre, no solo busca concienciar sobre el problema del hambre en el mundo, sino también promover prácticas agrícolas sostenibles, combatir la desnutrición y garantizar la seguridad alimentaria.
Al conmemorar este día, reafirmamos nuestro compromiso con un futuro donde la alimentación sea un derecho y no un privilegio, y donde todos podamos vivir en condiciones de dignidad.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) celebra el Día Mundial de la Alimentación, destacando su importancia para alcanzar el Desarrollo Sostenible en el mundo.